Las películas de Octubre

Este mes de Octubre ha venido marcado, como estaba previsto, por los musicales y Battlestar Galactica. Más allá de la serie, que estoy a punto de acabar (he visto unos 30 capítulos este mes) y que cada vez me interesa más conforme se acerca el final (me quedan unos 5), este mes he visto 16 películas. No está mal… Son más de 50 horas de ficción. Tuvo mucho que ver la gripe, que no tuvo piedad, y que me convirtió en una especie de un lamentable resto humanoide sobre la cama.

Al grano; la recomendación, sin duda, para la película que ganó en el Festival de Sitges; Moon, de Duncan Jones. Creo que es una de las propuestas más inteligentes que hay en las pantallas ahora mismo. Cuenta la historia de un minero que lleva trabajando casi 3 años en soledad en la luna y empieza a sufrir algunas alucinaciones que le revelarán una terrible verdad. Como digo en la crítica, tiene algunos errores de guión, pero en general, te absorbe. Tiene un gran sentido del ritmo y de la estética.

No hubiera sido justo ponerla como la recomendación al lado de Moon, pero creo que los fans de Woody Allen tienen que ir a ver Si la cosa funciona. Me parece que, en cierto modo, recupera al Allen más divertido. Yo creo que esta vez se desmelena con un alter ego no interpretado por él, que le permite dotarlo de un perfil más corrosivo.

El gallifante del peñazo, sintiéndolo mucho, no tengo más remedio que entregárselo a rec 2. Balagueró suele darme una de cal y otra de arena. En algunas ocasiones me ha hecho disfrutar mucho y en otras, no tanto… REC era una historia con un final un pelo tramposo, pero muy divertida. Y es cierto que, en algún momento, te levantaba de la butaca. Rec 2 parece cogida con pinzas. Ya el arranque lleva a un esperpento tal, que te desenganchas.

Pero de producción nacional a producción nacional y esta vez para dar una buena noticia. La sorpresa me la llevé con Hollywood contra Franco. No tanto porque esperara antes de verla que no iba a gustarme sino porque, cuando la descubrí me llamó la atención su temática y, además, creo que me ha dado un nuevo punto de vista sobre la guerra civil española muy a tener en cuenta para capturar las esencias de nuestro presente.  Y detalles como que Franco consiguió censurar una película allí de la Columbia. ¿Os lo imagináis? ¡Influyendo en los Estates!

El clásico, como no podía ser de otra manera en la época que estoy pasando, es para un musical. En este caso para Melodías de Broadway 1955, con Fred Astaire y Cyd Charisse. Dirigida por el gran Minelli, cuenta la historia de una ex estrella de Broadway que vuelve a los teatros con una versión moderna de Fausto (es el personaje histórico-mitológico del medievo que vendió su alma al diablo a cambio de sabiduría). Tiene gracia la traducción que han hecho del título porque en inglés, ni se llamó melodías de Broadway, sino The band wagon (La banda del vagón), ni se estrenó en 1955 sino en 1953 (imagino, aunque no lo sé, que en España sí).

Y acabo con la película que más me ha gustado de las que hemos hecho en el XISC. Sin duda, La clase es casi imprescindible. Es un retrato de un curso escolar de un colegio de un suburbio de París. Está basado en una novela escrita por el mismo tipo que la protagoniza, y los alumnos son reales de esa zona de París. La película tiene mucho de documental y, en este caso es especialmente crítico lo que comentaba el otro día de la versión original. La espontaniedad de los alumnos desaparece al doblarlos.

Me pregunto qué me espera el mes de Noviembre. Por de pronto, tengo una buena lista para acabar los posts de musicales (que ya se acercan a su final) y un montón de estrenos para los que ¡no tengo suficiente tiempo! Por supuesto, si queréis, podéis lanzarme propuestas, que estoy seguro que hay muchos títulos que no tengo controlados y merecen la pena.