Los globos de oro y Avatar, la mejor comedia del año

Me levanto esta mañana y recibo (sin demasiada sorpresa) que Avatar ha arrasado esta noche en los Globos de oro. Entre otros, la película se ha llevado el premio a la mejor película dramática y mejor director.

Que Avatar tenía vocación de ganar muchos premios (y probablemente se llevará muchos Oscars), no es un secreto.Las películas no se estrenan cuando lo hacen de forma improvisada. El hecho que avatar haya saltado a la palestra en diciembre, en fechas muy próximas a los dos premios más importantes del año, demuestra de forma casi explícita la voluntad de atracarse a premios.

Tampoco es nada nuevo que la industria (entendida en sentido amplio) haya apoyado subproductos que, por un motivo o por otro eran estratégicos. Y lo han hecho sin pensar en las posibles repercusiones negativas que esto pudiera tener para los premios.

Casi diría que hacen bien, pero sólo desde el punto de vista de negocio (que ya entiendo que es el prioritario). El público al que van dirigidas estas entregas tiende, no sólo a apoyar los resultados sino a apoyarse en ellos para basar sus opiniones y sus decisiones de compra de entradas.

Todo ello, por eso, no evita que debiera dar verguenza a más de uno que la industria se permita premiar este despropósito disfranzándolo de obra creativa y sobresaliente.

Quizás deba aceptar que para seleccionar a la mejor película hay que analizar valores más allá del guión. Quizás la realización, desde el punto de vista visual, desde el punto de vista coreográfico o desde la creación de un teórico mundo que sólo estaba en la imaginación de Cameron tiene un valor. Pero discrepo.

El guión es una condición sine qua non para que una obra cinematográfica pueda ser considerada aceptable. Es cierto que hay más elementos, algunos muy importantes. Incluso tanto como el guión. Pero eso no convierte al guión en algo prescindible.

Y tampoco nos equivoquemos. ¿De verdad es tan imaginativo el mundo creado por Cameron? ¿Pintar de azul a 4 (o 400) indígenas americanos es tener una gran imaginación? ¿Esa especie de conexión vía coleta-Ethernet con el planeta al estilo New Age es algo nuevo y sorprendente? Yo tengo serias dudas.

Supongo que muchos leerán en este post un ataque al cine comercial, pero eso tampoco es certero 100%. Yo reconozco que los productos pensados para venderse en volumen tienden a interesarme poco o nada. No soy target, pero me parece perfecto que se produzcan. Eso sí, que no me vendan gato por liebre.

Avatar competía con otras 4 películas; Malditos bastardos, En tierra hostil, Up in the air, y Precious. He visto las 3 primeras, todas ellas productos claramente comerciales y cualquiera de ellas infinitamente mejores que la premiada. Y las referencias que tengo de Precious también son buenas.

Cuando Cameron arrasó con Titanic yo dije que igual era algo desmesurado pero la película estaba muy bien hecha. Creo que la valoración de estas cosas no hay que hacerla tanto en base a gustos personales muy establecidos sino a criterios algo más abiertos y objetivos.

El año que viene tengo leído que se estrenarán 50 pelis en 3D y eso hay que rentabilizarlo como sea. ¿El precio? Permitirnos el lujo de dejar en la cuneta el trabajo brillante de otras personas. Quizás no es tan importante. Pero el día que se comete la atrocidad necesito criticarlo. Mañana será otro día.