Youtube en el futuro

La televisión por internet está evolucionando muy rápido. Aún han de acabar de encontrar su espacio y, las que ya lo tienen, son conscientes de que la relación con el vídeo puede cambiar bastante en lapsos de tiempo bastante cortos.

Y de eso no se libra ni el líder, youtube. A tenor de esto, en su blog, han colgado un post tratando de imaginar cómo sería youtube en el futuro. Partían de una serie de preguntas, la mayoría de dificil respuesta y muy ligadas al tipo de servicio que ofrecen;

¿Cómo van a utilizar los usuarios los ordenadores para interactuar con el vídeo? ¿Con qué velocidad esos vídeos pasarán a la televisión o al móvil?

¿Cuáles son las mejores formas de ayudar a la gente a descubrir los vídeos más interesantes? ¿Qué nuevas recomendaciones puede ofrecer el buscador? ¿Es factible basarlas en los gustos de gente con algún criterio? ¿Qué están viendo tus familiares y amigos?

¿Cómo podemos permitir a la gente a organizar youtube a su gusto? ¿Como los expertos de nuestra comunidad nos pueden ayudar a mejorar nuestra gran colección de vídeos?

No es fácil contestar ninguna de estas preguntas y, en el fondo, toca los dos temas clave del webtv; la convergencia con el resto de tecnologías (televisión y móvil) y el social media aplicado al vídeo (establecer grados de relación, hacer que la comunidad construya…)

Creo que el auténtico caballo de batalla de youtube va a ser uno de los temas que tocan; ¿cómo conseguir prescriptores de contenido? El gran conflicto de youtube es su gran éxito. Hoy por hoy, cada minuto se suben 20 horas de vídeo, así que es imposible verlo todo.

En ese momento, el sistema de recomendaciones es básico para que tu visita con acabe convertida en una inacabable búsqueda de vídeos que no merecen la pena. Encontrar prescriptores es una buena idea, pero el cómo conseguirlos no parece fácil.

Desde luego abre una reflexión y hace comprender por qué youtube lidera el sector de la televisión por internet, se preocupan por el usuario.

United Airlines y las guitarras rotas

Vía un par de twitts de Nerea Madina, de transket, he descubierto el último viral en USA.

Resulta que al grupo Sons Of Maxwell (nombre muy propio para estos días que estoy haciendo la serie de posts de física ;)) en un vuelo con la compañía United, le rompieron una guitarra. Por lo visto, intentaron alertar a la compañía del maltrato al equipaje, pero nadie hizo mucho caso. Total, que después de unos meses pidiendo explicaciones a la empresa, acabaron por desistir.

Por desistir frente a la compañía, porque sí tomaron cartas en el asunto. Dave Carroll aprovechó su página web (que supongo que ya tenía) y la cuenta de facebook del grupo (que supongo que también tenía), y lanzó un vídeo a youtube con una canción protesta contra la compañía. Por cierto, cómo ha cambiado este género musical, ¿no os parece? Además, Dave se creó una cuenta en twitter para dar algo más de relevancia a la historia. Y la cosa acabó así;

El tema fue un éxito. Y eso ha provocado que United Airlines ha hecho una donación a «caridad musical» (no sé muy bien qué será eso, pero bueno). Pero imagino que el grupo, vistos los 5 millones de reproducciones, ha decidido a hacer un segundo tema, que es este;

Delante de este tipo de virales, surgen varias preguntas;

1º/ Que un día un tipo o una empresa te haga una desgracia puede ser una buena noticia. Bien llevado, como es el caso, ha significado una notoriedad enorme a coste, sólo, de una guitarra.

2º/ Aquí una empresa ha dañado su imagen haciendo una mala gestión del equipaje. O eso, o lo contrario. ¿Cómo podemos saber si lo que Sons of Maxwell no está mintiendo y es sólo una campaña de notoriedad? ¿Cómo podemos contrastar su veracidad? Por supuesto, no digo que sea mentira, sino que me parece que esto puede llegar un punto en el que los bulos corran de un lado al otro sin que, al final, sepamos qué es cierto y qué no.

y 3º/ ¿Realmente está dañando esto a la empresa? No hay duda que campañas de este tipo han hecho daño a empresas. Pero, ¿eso tiene que ser necesariamente siempre así? ¿Realmente han notado una bajada en los clientes después de esta campaña? No lo sé, pero es evidente que las compañías preferirían no vivir ese riesgo.

No hace mucho tiempo, Marc Cortés y Genís Roca, después de tener problemas con una compañía aérea, se quejaron en twitter y eso generó una cierta reacción en cadena. Dudo que eso afectara realmente a los resultados de la compañía, como también lo hago de que a la compañía le hiciera demasiada ilusión que dos personas de tanta relevancia en la red estuvieran quejosas.

Con un poco de imaginación y realizando un par de vídeos realmente divertidos, Sons of Maxwell han sido capaces de reconvertir algo negativo (perder una guitarra) en algo que les ha catapultado al éxito. Puede que las malas formas de empresas como United sea una fuente de guitarras rotas, pero los sueños de algunas mentes imaginativas crecerán a su alrededor.

Hasta que la muerte los separe

No sabía si publicar este vídeo porque ya, más o menos, todo el mundo lo ha visto. Después del de Susan Boyle, es el vídeo del momento. Al final, he llegado a la conclusión que debía estar en la web precisamente por eso. Si no lo habéis visto, valorad vosotros mismos.

Personalmente creo que tiene gracia y lo que está claro es que a la gente le ha encantado. La primera noticia que tuve de él fue en webTVwire, donde han planteado en dos posts debates bastante interesantes.

El primero de ellos sobre hasta qué punto es lógico hacer vídeos pensando en que sean virales. Su tesis se basa en el hecho de que el encanto de un vídeo domestico que se viraliza es su espontaneidad y, en este caso, parece hecho para conseguir ese efecto. Además, están convencidos, y comparto esa opinión, que ahora vendrán un buen puñado de copias. Desde mi punto de vista, el hecho de que un grupo de amigos haga algo pensando en que a la gente le pueda hacer gracia verlo y que tengan razón no me parece nada malo. Al final de la historia, lo que le pedimos a estos vídeos es autenticidad y poco más.

En el segundo, sus consideraciones giraban en torno a que, detrás de esto, youtube ha obtenido muchas visitas que acaban traduciéndonse en dinero. Por ahora son 16 millones y medio de visualizaciones. Y, por otro lado Sony y Chris Brown, creador de la canción que suena (forever), han visto aumentadas las visitas a sus vídeos. Sony podría haber borrado el vídeo porque, en principio, es ilegal utilizar temas con copyright como ya sabéis. En este caso lo han dejado y se han beneficiado claramente.

Albert de Nicodemo lo twitteo, y hoy me ha vuelto a llegar por el twitt de Nerea Madina, integrante de Transket, uno de los proyectos que se presentaron al campus de seedrocket de este julio pasado.

Versión original en series

lost

Aunque suelo dar la batalla por perdida, muchas veces trato de convencer a la gente que ver películas (y, por qué no) televisión en versión original es una buena idea. Ellos suelen tener la impresión que, de hacerlo, se pierden buena parte de lo que pasa porque no pueden «ver» las imágenes. Pero, en mi opinión se equivocan.

Si eres de los que opinan así, imagínate que eres el director de la película. ¿En qué incidirías más a la hora de exigir a tus actores? Obviamente las caras y los gestos. Pero, ¿no sería para ti muy importante cómo dicen las cosas? Honestamente, el trabajo de un actor es en, por lo menos, un 50%, la entonación.

Y lo que sucede cuando se dobla una película, por bien que se haga, es que hay un director de doblaje que no tiene por qué tener la misma visión del proyecto que el verdadero director de la obra. Además, los sonidos pasan a sonar enlatados, artificiosos. Hasta tal punto que, cuando te acostumbras a la versión original, el doblaje que distrae continuamente de la historia.

Pero ahora parece que muchos de ellos, la necesidad de estar a la última en las series que siguen, ya sea Lost, Anatomía de Grey o Battlestar Galactica, pasa por encima del miedo a la versión original. Y eso pasa por hacer cosas ilegales 😉 y verlo subtitulado.

Quizás eso dé una oportunidad real a la versión original en nuestro país, muy acostumbrado al «cómodo» doblaje. Y para los que aún no os hayáis atrevido, os garantizo que, en cuanto hayáis visto un par de episodios (o películas) veréis que vuestra capacidad de «leer» y «ver lo que pasa» aumenta. Y es que no se leen subtítulos como se leen libros. Pero ese ya es otro tema.

¡Ah! Y otro argumento falaz es aquel que alguna vez me han dicho; «claro, tú como entiendes el inglés.» Bueno, pues ni mi inglés es tan bueno como para entenderlo absolutamente todo, ni me restringo a ver películas en inglés. De hecho, veo mucho cine europeo en sueco, alemán, italiano, rumano (que ahora está bastante de moda), e incluso coreano, japonés… ¿Por qué no iba a hacerlo?

Los que aún no os hayáis atrevido, os recomiendo que lo probéis con alguna de estas películas en inglés que hablan poco y corren mucho (de acción) y le déis 3 ó 4 películas de margen. El resultado os satisfará, ya lo veréis.

Para acabar con la piratería

piratas

El debate de acabar con la piratería empieza a sonar a gastado, pero parece que los creadores de contenido prefieren protestar por lo injusta que es la vida. Bueno, eso es lo que hacen en público, porque estoy convencido que en privado deben estar moviendo ficha, aunque sea lentamente. Pero, por si acaso, vamos a repetir otra vez la solución.

El sector tiene un problema; ellos crean un producto que otros distribuyen de forma gratuita por la red. Y entonces el negocio muere. Frente a eso, sólo son capaces de hacer dos cosas; quejarse porque es muy injusto que ellos creen un contenido que es lo que de verdad aporta valor a la red, y otros (las operadoras como telefónica) son las que hacen el negocio con las tarifas de ADSL (algo de razón tienen). Y si no hacen eso, señalan unos supuestos valores añadidos a la sala de cine que muy pocos ven (eso reflejan las audiencias de las salas).

A la gente, en general, le pasas una copia con una imagen pixelada y con un audio con mucho ruído, y les da igual. Luego el discurso de la sala se tiene que acabar. Como alguna vez ha dicho Àlex Gorina, lo más probable es que las salas pasen a ser casi una atracción. Algo parecido a como hoy vamos al Imax. Pero que ni en broma será el lugar donde la gente irá a ver sus ficciones favoritas.

Sólo hay una solución que pare esta sangría. Y cuanto antes lo hagan, mejor para todos. Ofrecer algo que sea mejor que ese «gratuíto» de la red. Si ahora quieres descargarte algo, tienes que tener una cierta previsión (cada vez menos, es cierto). Luego, ofrece inmediatez. Si lo quieres ver, lo ves. Y la manera de ofrecer eso es con streaming. Lo que hace youtube, vamos.

Estoy seguro que, por contenidos muy premium, de mucho interés social (tipo Harry Potter) y en producciones minoritarias pero para sibaritas del cine, la gente estará dispuesta a pagar pequeñas cantidades de dinero, pero creo que en este país no estamos acostumbrados a pagar por los contenidos audiovisuales. Así que me decanto porque la mayoría de los contenidos llevarán publicidad. Eso sí, si la publicidad que llevan es como la que ahora hacen en televisión (creo que son 20 minutos por hora), la gente seguirá descargándose las cosas porque eso es insoportable.

Según en una entrevista publicada en El Pais a Al Lieberman, profesor de marketing de el programa de Entretenimiento, Medios y Tecnología de la Universidad de Nueva York (algo sabrá este tipo, digo yo), y que descubro gracias al blog de Gonzalo Martín, la industria americana ya ha aprendido del error que cometió el sector de la musica. Y no quieren caer en lo mismo con lo audiovisual.

Y, a la vez, en webwire TV, han publicado un artículo en el que hablan de imitar el modelo que ofrecen en la música Spotify, Last.fm, o We7. Y, de hecho, pone como ejemplos de eso el canal de la BBC (iPlayer), la experiencia de Channel 4 con 4oD, y Hulu, que vienen a ofrecer ese servicio. Hollywood también está arrancando su propio proyecto, un servicio de HD para películas.

Yo estoy convencido que es cuestión de tiempo porque parece que cae por propio peso. Cuánto tardarán no en darse cuenta sino en aceptarlo, ya no lo sé.

Youtube y los falsos mitos

youtube

Youtube está cansada de que ciertas ideas estén asociadas a su marca sin que puedan hacer nada para remediarlo. Por eso, han creado una lista de lo que, según ellos, son falsos mitos con los que quieren acabar, que yo he descubierto en webwire TV. A saber;

1er mito. Youtube está limitado a contenidos de corta duración y generados por los usuarios. Youtube señala que eso era así al principio. Pero con la entrada de Google, la empresa hizo un giro. Ahora, en su plataforma, también pueden encontrarse contenidos de larga duración generados por profesionales.

2º mito. Los contenidos son de mala calidad. Todos tenemos asociada la idea de que un vídeo en youtube es igual a vídeo pixelado y cutre. Pero el hecho cierto es que, desde hace un tiempo, ya pueden verse videos de alta calidad en su plataforma.

3er mito. El tráfico, crecimiento y las subidas de vídeos están haciendo perder mucho dinero a la empresa. Como sabéis, cada minuto se suben 20 horas de vídeo a youtube. Pero es cierto que nadie sabe a ciencia cierta cuánto dinero pierden y ellos aseguran que, cuanto menos, el crecimiento y el volumen de vídeos, no pueden ser malos. Y estoy de acuerdo cuando detrás tiene una empresa con el colchón financiero de Google.

4º mito. Los anunciantes temen a Youtube. Por la propia naturaleza libre de subida de vídeos por los usuarios, muchos pensamos que los anunciantes tienen miedo de asociarse a ciertos vídeos sin quererlo (imaginad que una marca de coches que venda seguridad, salga antes de un vídeo relacionado que acaba siendo un accidente). Pero youtube, para demostrar que estamos equivocados, dice que el año pasado, el 70% del Top 100 de las marcas que elabora la prestigiosa publicación Ad Age, hicieron campañas en su web.

5º mito. Youtube sólo es capaz de hacer negocio en el 3-5% de sus vídeos. Según ellos, no sólo no es así, sino que son el portal que más vídeos es capaz de monetizar en todo internet. Eso sí, no da cifras. Así que sospecho que dicen la verdad pero es que con el volumen de vídeos que tienen, las dos cosas pueden ser ciertas.

En cualquier caso, como ya publiqué, youtube (o mejor dicho google) representa el 72% de todos los vídeos vistos en la red y creciendo. Aunque los 5 mitos fueran ciertos, a las grandes productoras de contenido les ha salido un serio competidor. Y si no, al tiempo.

Mary Poppins es una película de miedo

En el blog ya analizamos con bastante profundidad el vídeo de Guardiola en la final de Champions League de Roma. Y si aquella propuesta era interesante por la trascendencia del evento, os quiero enseñar un montaje que nace del propio espíritu de la red.

Alberto Tognazzi ha colgado en su blog un par de trailers; uno de Mary Poppins y otro de El resplandor. Hasta aquí nada raro. Pero, ¿qué me diríais si a Mary Poppins la hubieran convertido en una película de terror y El resplandor la historia de una familia feliz?

¿Cómo puede convertirse el clásico de Disney en una historia de miedo? En el fondo, una película no es más que una combinación de planos uno detrás de otro. Y lo que de verdad da sentido al metraje no es lo que sucede en los planos sino la relación que se establece entre los planos.

Este hecho ya lo estudiaron los rusos en los años 20, que son los que más interés pusieron en el montaje. Concretamente, el que más lo estudió acabó por darle nombre; es lo que se conoce como efecto Kuleshov.

En el blog de Alberto podéis ver el montaje de El Resplandor, que no tiene desperdicio. Mientras, os dejo con otro montaje, en este caso de La señora Doubtfire, que es muy divertido.

Roadweb y Balzac TV

Ya sabéis que muchos de los webTV’s de este país, pasamos un fin de semana en Benidorm para hablar del presente y el futuro de las televisiones online.

Uno de los promotores era Balzac TV que, como sabéis, producen contenidos sobre innovación. Los días que estuvimos allí, nos entrevistaron a todos y ahora han lanzado el primero del que parece una serie de vídeos sobre el evento.

En este salgo opinando sobre cómo creo que afectarán los cambios en la tecnología sobre la forma de los contenidos.

En fin, disfrutad del episodio, a pesar de mi, vale la pena;

 

 

ACTUALIZACIÓN: Por desgracia, el vídeo ya no está online.