The pacific es la nueva serie que está siendo promocionada fundamentalmente con 3 aspectos; es la más cara de toda la historia, que está liderada por Tom Hanks, Steven Spielberg y Gary Goetzman y que se estrena con sólo un decalaje de 1 día respecto a USA. Puede que la serie esté muy bien aunque a priori tampoco es que me interese personalmente demasiado. Pero creo que su estreno implica que la industra ha asumido los cambios que la red ha traído.
En primer lugar, parece que cada vez es más fácil rentabilizar un gran presupuesto en televisión que en el cine. El deporte sigue siendo de riesgo (8 de cada 10 estrenos acaba en fiasco).
Por lo menos, del lado de los gastos, la televisión parece no requerir tanto el protagonismo de mega estrellas o, al menos, no exige que todos lo sean. Eso baja mucho los presupuestos. No hay que olvidar que los presupuestos desmesurados del cine llegaron con los videoclubs y la sensación de que el mercado crecía tanto que nunca pararía. Algo parecido a lo que ahora estamos pagando con el tocho. Así, el presupuesto puede dedicarse a, de verdad, adornar la narración en elementos más atractivos (sobre todo, efectos especiales).
Del lado de los ingresos, hace poquísimo, alguna serie de éxito ha tenido que cancelarse por un excesivo coste. Es conocido el caso de Roma. Es verdad que la televisión requiere unas audiencias descomunales para soportar los gastos si estos son muy elevados (24 caerá por eso). Pero dicho esto, que se supere el mayor presupuesto de la historia (en este caso hablamos de 200 millones de dólares) es un hecho significativo.
Todo ello viene acompañado de una campaña de marketing propia del hermano mayor, el cine. Carteles en todas partes, promos espectaculares en televisión. Todo un ejemplo de cómo atraer lo cinematográfico a la pantalla, ya no tan pequeña.
Hemos hablado algunas veces de cómo la televisión está, poco a poco, atrayendo el talento del cine a sus feudos. Eso nunca había sido así. En el caso de España, a pesar de que la mayoría de actores se ganan mejor la vida en la tele que en el cine, optan por lo segundo si está a su alcance. Poco a poco, eso está dejando de ser así. Algo de calado está cambiando.
Parte de ello yo creo que es a causa del uso intensivo de internet. Nos hemos acostumbrado a consumir todo un día en una sola ficción. Nunca, hasta ahora, nos habíamos sentado delante de la televisión (o del ordenador) para tragarnos 12 horas de la misma historia. Es un cambio muy relevante en las costumbres de los espectadores.
Y sobre el último elemento internet aún tiene más incidencia; el estreno simultáneo entre USA y el resto del planeta. Es algo que demuestra que la industria americana, además de quejarse (y mucho), ha tomado cartas en el asunto. Teniendo en cuenta que la serie la hacen en Canal + y, por tanto, sin publicidad, ¿para qué iba a descargarla la gente? Así, internet y la piratería, están trayendo cambios positivos para el usuario (conste con esto que no estoy tratando de justificar las descargas fraudulentas. Creo que ya conocéis mi opinión).
Lost se ha convertido en el símbolo del cambio de los usuarios. Quizás The pacific sea el símbolo del cambio de la industria. Lo que es seguro es que, unos y otros, estamos cambiando nuestra relación con el hecho audiovisual. Y a una velocidad de vértigo.