(NOTA: Si has aterrizado aquí buscando en un buscador, que sepas que este post es parte de una colección de artículos para aprender a escribir, que puedes encontrar aquí)
Antes te pedía que tuvieras paciencia y vieras el proceso de creación de un guion como una cocción lenta. Por fin, llega el momento de tomar la cuchara de palo y dar un primer sorbito a la sopa para saber qué gusto tiene. No se trata todavía de ajustar el sabor. El punto de sal se lo daremos más adelante. Por ahora vamos a buscar las trazas más importantes de nuestro caldo.
Una vez tenemos claro de qué va nuestra historia gracias a la premisa, llega el momento de aclarar cuáles son los elementos más importantes. En esencia, se trata de fijar los protagonistas y hechos más relevantes.
Si hemos quedado que profundizaremos más adelante sobre la estructura de la historia, todo este rollo, ¿a qué viene? Viene a que ahora hemos de sentar las bases de ese argumento que, más adelante, desarrollaremos. Se trata de, en 5 líneas, sentar las bases de toda la narración.
En estas 5 líneas ha de estar contenido lo más esencial de los tres actos de la historia. Recuerda que estoy hablando de 5 líneas. Sigue sin ser el momento de que me cuentes todos aquellos detalles que tanto te gustan. Vuelvo a necesitar una visión precisa, pero en el menor número de palabras posible. Vamos a poner la zanahoria, la patata y el pollo al caldo. Las especias, vendrán después. Como vas a necesitar muchas, recuerda que todas las que se te ocurran antes de hora, deberías apuntarlas en tu libreta.
Teníamos un mantra; nuestra premisa. Habíamos conseguido que, en una sola frase, apareciera el motor de la historia. La definimos como el corazón con el que iba a latir. Ahora nuestro objetivo es sentar unas bases, una guía que nos garantice el éxito.
Por supuesto puedes hacer el esfuerzo de escribir estas cinco líneas “a pelo”. Prueba y, cuando acabes, asegúrate que en ellas están planteadas
las directrices de los 3 actos. Yo no lo hago así. Te recomiendo que te formules 4 preguntas:
1º/ ¿Qué quiere conseguir el héroe o heroína?
2º/ ¿Quién quiere evitarlo?
3º/ ¿Qué pasa?
4º/ ¿Cómo acaba?
¿Te atreves a seguir? Sigue descubriendo cómo crear tu propio argumento narrativo.