Google TV y el contenido de Hulu

 

Desde hace algún tiempo el futuro de Hulu ha ido en varias direcciones. Hemos hablado de un posible cierre sin más a una venta a la que algunas veces cuesta encontrarle el sentido. En este proceso estaban implicadas hasta ahora Amazon, Yahoo, y Dish Network con unas cifras entre los 1500 y los 2000 millones de dólares. Y ahora a esta lista, se ha sumado Google.

Casi sin que podamos saber cómo Google acaba metido en todas las guerras, desde el móvil hasta las redes sociales. En el vídeo ya andaba inmerso desde hacía tiempo. Ahora ya hace bastante tiempo compró youtube y con google TV se lanzó a la caza del contenido premium.

Google TV pretendía ser un inmenso agregador de contenido de calidad. Pero la experiencia fracasó por problemas, precisamente, con los contenidos. A su vez, youtube hizo un giro y comenzó a ofrecer contenido premium: desde eventos deportivos a conciertos de interés internacional. También sabíamos que Google TV iba a ser relanzado a finales de este año en USA y a principios de 2012 en UK.

El problema de Google TV es (o quizás era) la falta de ese contenido tan deseado por todos. Y sin contenido, no tiene sentido. Pero Google, que si de algo no tiene problemas es de cash, pretende con esta posible compra conseguir ese contenido por la vía rápida.

Siempre digo que a mi me genera muchas dudas la venta de Hulu. Si los actuales propietarios son los propios generadores de contenido, ¿qué garantiza que estos no venderán su contenido a otros? De todas maneras, parece que uno de los elementos del acuerdo es la exclusiva durante al menos 2 años.

Hay que reconocer que la suma es explosiva, o mortal, como la definen en webTV wire. No hay que olvidar las espectaculares cifras de audiencia que agrega Google en vídeo ya hoy. La guerra entre los distintos distribuidores de contenido se está tornando cada vez más fuerte y cada vez más global. No sé en qué lugar quedarán los players locales, pero su papel se hace cada vez más difícil de imaginar en el futuro. Seguramente acabará siendo residual.

Sería interesante debatir hasta qué punto es bueno que Google sea capaz de controlar todo el contenido que consumimos, sea del tipo que sea. Lo que es seguro es que busca su lugar y suele hacerlo con buen tino. El tiempo dirá cuál es el futuro de los contenidos.