Alberto Lacasa

Audiovisual, política y más allá

Date archives agosto 2009

peliculas / terror

El retorno de los malditos

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Valoración: 4,5/10

Tag line. Segunda parte de las colinas tienen ojos donde un batallón del ejército se ve obligado a enfrentarse a los mutantes.

Breve crítica. Prescindible segunda parte a uno de los mejores remakes que se han hecho nunca de una película de terror. No aporta nada nuevo y no hay un sólo momento del film en el que supere a su predecesora. Es sólo una sucesión de acciones que, en el mejor de los casos, entretiene. Por cierto, no acabo de entender la “innovación” en el título traducido al castellano.

Género. Terror.

Director. Martin Weisz.

Guión. Wes Craven, Jonathan Craven.

Intérpretes. Michael McMillian, Jessica Stroup, Jacob Vargas, Daniella Alonso.

Título original. the hills have eyes II.

Año de estreno. 2007.

País. USA.

peliculas / serie

Battlestar Galactica (serie) – 1ª temporada

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Valoración: 7,5/10

Argumento. 40 años después de que el hombre creara máquinas humanoides y que, tras una revuelta, consiguiera expulsarlas, los cylons vuelven para buscar venganza. Los humanos han de escapar en una pequeña flota de naves, una de ellas una antigua nave de guerra; Galactica.

Breve crítica. La miniserie (2 episodios de 1 hora y media cada uno) se me hicieron algo pesados, pero la serie crece con cada episodio. Algunos momentos son brillantes y parece claro que a los personajes se les está sacando punta y que se les puede sacar mucha más con lo que viene. El final de temporada, espectacular.

Género. Ciencia ficción, aventuras, drama.

Intérpretes. Edward James Olmos, Grace Park, James Callis, Jamie Bamber, Katee Sackhoff, Mary McDonnell.

Título original. Battlestar Galactica.

Año de estreno. 2003.

País. USA.

Empresa y vídeo online / internet

United Airlines y las guitarras rotas

Vía un par de twitts de Nerea Madina, de transket, he descubierto el último viral en USA.

Resulta que al grupo Sons Of Maxwell (nombre muy propio para estos días que estoy haciendo la serie de posts de física ;)) en un vuelo con la compañía United, le rompieron una guitarra. Por lo visto, intentaron alertar a la compañía del maltrato al equipaje, pero nadie hizo mucho caso. Total, que después de unos meses pidiendo explicaciones a la empresa, acabaron por desistir.

Por desistir frente a la compañía, porque sí tomaron cartas en el asunto. Dave Carroll aprovechó su página web (que supongo que ya tenía) y la cuenta de facebook del grupo (que supongo que también tenía), y lanzó un vídeo a youtube con una canción protesta contra la compañía. Por cierto, cómo ha cambiado este género musical, ¿no os parece? Además, Dave se creó una cuenta en twitter para dar algo más de relevancia a la historia. Y la cosa acabó así;

El tema fue un éxito. Y eso ha provocado que United Airlines ha hecho una donación a “caridad musical” (no sé muy bien qué será eso, pero bueno). Pero imagino que el grupo, vistos los 5 millones de reproducciones, ha decidido a hacer un segundo tema, que es este;

Delante de este tipo de virales, surgen varias preguntas;

1º/ Que un día un tipo o una empresa te haga una desgracia puede ser una buena noticia. Bien llevado, como es el caso, ha significado una notoriedad enorme a coste, sólo, de una guitarra.

2º/ Aquí una empresa ha dañado su imagen haciendo una mala gestión del equipaje. O eso, o lo contrario. ¿Cómo podemos saber si lo que Sons of Maxwell no está mintiendo y es sólo una campaña de notoriedad? ¿Cómo podemos contrastar su veracidad? Por supuesto, no digo que sea mentira, sino que me parece que esto puede llegar un punto en el que los bulos corran de un lado al otro sin que, al final, sepamos qué es cierto y qué no.

y 3º/ ¿Realmente está dañando esto a la empresa? No hay duda que campañas de este tipo han hecho daño a empresas. Pero, ¿eso tiene que ser necesariamente siempre así? ¿Realmente han notado una bajada en los clientes después de esta campaña? No lo sé, pero es evidente que las compañías preferirían no vivir ese riesgo.

No hace mucho tiempo, Marc Cortés y Genís Roca, después de tener problemas con una compañía aérea, se quejaron en twitter y eso generó una cierta reacción en cadena. Dudo que eso afectara realmente a los resultados de la compañía, como también lo hago de que a la compañía le hiciera demasiada ilusión que dos personas de tanta relevancia en la red estuvieran quejosas.

Con un poco de imaginación y realizando un par de vídeos realmente divertidos, Sons of Maxwell han sido capaces de reconvertir algo negativo (perder una guitarra) en algo que les ha catapultado al éxito. Puede que las malas formas de empresas como United sea una fuente de guitarras rotas, pero los sueños de algunas mentes imaginativas crecerán a su alrededor.

personal

El Big Crunch no es una tableta de chocolate crugiente

Todo en este mundo tiene un inicio y un fin. Asumimos que el inicio del Universo ya lo sabemos; el Big Bang. También parece que es ineludible que el tiempo siempre va hacia adelante en la dirección que nos marca la entropía.

Y entonces, ¿todo esto cómo se acaba? Pues la respuesta no está clara, pero siempre incorpora un big en su nombre y ya os advierto que ninguna es demasiado alentadora ni apetecible.

Vamos a jugar con una pelota. La lanzamos al aire y esperamos a que vuelva a caer. Utilitzando siempre la misma fuerza, si la pelota pesa mucho no llegará tan alto como si la pelota es ligera. Y si la lanzo con más fuerza, tardará más en caer que si la lanzo con poca fuerza. Y existe la posibilidad de que si la lanza Asterix, la pelota salga tan rápido que acabe por escapar de la gravedad de la Tierra y acabe vagando por la galaxia sin rumbo por siempre más.

Al Universo le pasa algo parecido. Hasta los años 90, los físicos estaban interesados en dos datos; la densidad del Universo (que viene a ser como el peso de la pelota), y la velocidad a la que se separan las galaxias (que sería la velocidad a la que lanzamos el balón).

Si el universo “pesa” demasiado poco, entonces es como cuando lanza la pelota Asterix. La gravedad no tendrá fuerza para parar la expansión. Aún así, el universo iría, cada vez, más lento. Todo estaría, cada vez, más aislado de lo demás. Además, las estrellas acabarían su combustible y en el universo acabaría haciendo un frío que pelaría y, encima, sin luz. Sería la muerte térmica del universo. Es lo que se conoce como Big Freeze, en castellano Gran Congelación. (NOTA: si os parece interesante, vale la pena mirar el enlace de la wikipedia que he puesto porque da muchos más detalles de cada uno de los procesos finales del Universo).

Pero, ¿qué pasa si el universo “pesa” mucho? Que la propia gravedad del Universo irá frenando las galaxias hasta que se paren y empiecen a retroceder. La pelota volvería a caer. Entonces toda la masa volvería a caer en un solo punto, como justo antes del Big Bang. Incluso se plantea la posibilidad de que eso provocaría que la materia chocara y se produjera un nuevo Big Bang, que se conoce como Big Bounce (Gran Rebote). Es más, podría ser que nuestro Big Bang no haya sido el primero… A esto se le conoce como el Big Crunch (Gran colapso).

Esta teoría tiene un problema y es que no cumple con la segunda ley de la termodinámica. Quedamos con que era obligatorio que las cosas estuvieran cada vez más desordenadas. Pero, en este caso, cada vez que hay un Big Bang, el Universo debería hacer un “reset”. Y eso, claro, incumple la ley. Hay incluso quien plantea la posibilidad que, en cuanto las galaxias empezaran a retroceder el tiempo cambiara de dirección, de tal forma que dejaría de ir para adelante para ir para atrás. Es decir, que los vasos no se caerían de la mesa y se partirían en 1000 pedazos, sino que, los 1000 pedazos se convertirían en una taza maravillosa.

Lo curioso es que a finales de la década de los 90, algunas mediciones de la velocidad de las galaxias, dieron resultados sorprendentes. La velocidad a la que se separan no sólo no se estaba frenando sino que, por lo visto, se acelera. O sea, que otra vez nos ha cogido la realidad a contrapie.

Parece que habría una fuerza en el universo que hace justo lo contrario que la gravedad, es decir, separar las galaxias, y que se notan sus efectos cuanto más alejadas están las unas de las otras. Aún así, el final que le espera a nuestro universo si esto se confirma es muy parecido al del Big Freeze pero más rápido. Le llaman el Big RIP,  que no hace falta que traduzca.

Si alguien pretendía la supervivencia eterna de la raza humana y se planteaba que, tarde o temprano, tendríamos que abandonar la Tierra porque algún día acabará engullida por el sol, ya puede empezar a pensar cómo saltar de este Universo a otro, si es que hay más…

personal

La sostenibilidad es mentira

Hoy he decidido ponerme provocador. Y sí, ya sé que me había comprometido a lanzar estos días de agosto posts de física. Pero es que este… lo es.

En la década de los 60’s nació un movimiento gracias a una actitud muy contestataria con el sistema establecido y, por qué no reconocerlo, las drogas que permitían conectarse con la naturaleza; el ecologismo. Gracias a ello, hemos adquirido una conciencia de que estamos destruyendo el medio ambiente. Y había que hacer algo.

Aunque ese discurso ha evolucionado, la esencia se mantiene. Uno de los conceptos que se maneja en la actualidad es la sostenibilidad. En definitiva, se trata de hacer un consumo que evite la destrucción del medio en base a un cambio en las fuentes energéticas y en el reciclaje. Pero entraña una dificultad insalvable que va en contra de las leyes de la física. Estamos condenados a consumir siempre más de lo que “extraemos”. Y la culpa la tiene la segunda ley de la termodinámica, también conocida como ley de la entropía. Me explico…

La ley de la entropía lo que dice es que, si tenemos un sistema con un cierto orden, pasado un cierto tiempo, ese sistema sólo podrá tener el mismo orden o estar aún más desordenado. ¿Suena denso? Piensa en tu habitación. Cada día entras y vas dejando la ropa que usas, coges ropa limpia, duermes, metes papeles… Si la dejas sola, acabará muy desordenada. Ella sola no va a ordenarse nunca.

Pero un día decides ordenarla; cambias las sábanas de la cama y coges la ropa sucia y la metes en la lavadora para luego plancharla. Pasas un trapo, limpias el polvo del armario con un trapo mojado. Y, por último, pasas la escoba, tiras a la basura los papeles que no te sirven y colocas bien los que te son útiles.

Tu habitación quedará como los chorros del oro. Pero eso implica que has llenado unas cuantas bolsas de basura con papeles que “desordenarán” un vertedero (puedes reciclarlo y, entonces llenarás el aire de partículas contaminantes por los tratamientos industriales), has “ensuciado” agua con el jabón y la suciedad de tu ropa. Y el agua que has utilizado para planchar la ropa ha pasado de líquido a vapor de agua (una forma más “desordenada” de agua). Con lo que el sistema acaba más desordenado en conjunto.

El universo es así. Tiende, cada vez, ha estar más desordenado. Es inevitable. ¿Te has preguntado alguna vez qué es el tiempo? Creo que Aristóteles decía que el tiempo era la medida del cambio. Si dejamos de lado las teorías cuánticas, que tratan el tiempo de forma bastante distinta, el tiempo desde un punto de vista físico, está íntimamente relacionado con la ley de la entropía. Y no sabemos por qué.

Imaginaos desayunando. Todos entendemos que, si se acerca un patoso a tu taza de café (podría perfectamente ser yo), puede tirarla al suelo y romperse en pedazos. Eso sigue la entropía. Antes estaba más ordenada (era una sola pieza) que ahora (que son un montón de pequeños trozos). Pero, cómo se nos quedaría el cuerpo si una taza rota subiera a la mesa y se convirtiera en una sola pieza. ¡Congelados! ¿Por qué? Porque iría en contra de la entropía.

Realmente es desconcertante que podamos ir para adelante y para atrás en cualquiera de las 3 dimensiones espaciales y, en cambio, no podamos hacerlo con el tiempo. Más ahora que sabemos que espacio y tiempo forman parte de una misma realidad que llamamos continuo espacio-tiempo.

Por todo esto, jamás tendremos sistemas 100% sostenibles en el sentido de que siempre nos veremos obligados a no violar la segunda ley de la termodinámica. Hay una trampa en todo esto. La Tierra no es un sistema cerrado porque nos llega mucha energía de fuera; el sol. Si somos capaces de aprovechar más energía del sol que la que extraemos de la Tierra para hacer los sensores que convierten esa energía en electricidad le estaremos ganando la partida en la generación energética (en otros aspectos no, como por ejemplo, en los desechos).

Pero hay algo que la mayor parte desconoce y es la dificultad de generar esos sensores. Están hechos de silicio, que está en todas partes. Pero no nos engañemos, extraerlo consume mucha energía en diversas formas; además del evidente necesario para extraerlo del suelo, gastamos silicio (que no parece muy importante porque hay mucho), pero hacemos enormes agujeros con multitud de material que se convierte en un residuo que tenemos que desechar de alguna forma. Tenemos también que poner esas placas en algún sitio que ocupan y el espacio también es un recurso.

He querido provocar un poco. Ni estoy en contra de la energía solar, ni mucho menos estoy estoy en contra de la sostenibilidad entendida como economizar recursos. Es más, estoy a favor. Pero, cuando en su día descubrí la ligazón estrecha entre la entropía y el tiempo, vi que el asunto es mucho más complejo de lo que yo había pensado.

personal

Big Bang, la teoría del microondas

Está claro que el ser humano siempre ha intentado saber de dónde venía. Y las teorías creacionistas (Dios nos hace a su imagen y semejanza) han funcionado durante siglos. Pero un día, a alguien le dio por mirar al cielo y preguntarse cómo funcionaba todo aquello tan bonito del cielo. Entonces llegó Newton y descubrió la gravedad. Los cuerpos se atraen entre si. Y surge la pregunta.

Si las estrellas se atraen entre si, deberían ir acercándose hasta juntarse, ¿no? Newton no tenía respuesta para eso. Llegó a la conclusión que universo era infinito, así que siempre encontraríamos un grupo de estrellas un poco más allá que impedirían que las de más cerca se juntaran, llegando a un equilibrio. Pero había un problema. Si eso fuera así, cada uno de los puntos de nuestro cielo acabaría en una estrella. O sea, en un punto de luz. En consecuencia, la noche debería ser tan luminosa como el día.

La teoría evolucionó. Algunos físicos, a principios del s. XX detectaron las galaxias y nebulosas estaban separándose de nosotros. Así que universo se expandía. De esta manera ya no hacía falta un universo infinito. Sólo había que encontrar la causa de esa expansión.

El primero en proponer la teoría del Big Bang fue George Gamow, un ruso nacionalizado estadounidense. Aquí vamos a acabar con un mito; el Big Bang no es una gran explosión que escupió materia por el espacio. En realidad, la teoría lo que dice es que, al principio, toda la materia y todo el espacio estaban concentrados en un sólo punto de densidad infinita. Tras el Big Bang, el espacio en si mismo se hacía más grande y, por tanto, la distancia entre las partículas se hacía mayor. ¿No lo entendéis? No os preocupéis, yo tampoco.

Hubble, que antes de ser un telescopio era una persona, calculó la velocidad a la que se separaban las galaxias y obtuvo lo que se conoce como ley de Hubble. ¿Os habéis fijado que la sirena de una ambulancia no suena igual cuando se acerca que cuando se aleja? Cuando se acerca suena muy aguda pero, en cuanto nos supera, se vuelve grave. Es lo que se conoce como efecto Doppler. La luz, que se comporta como una onda, sufre el mismo fenómeno. Cuando una galaxia se aleja se ve más roja. Si se acerca, la vemos más azul.

Como sabéis, el método científico exige que cada nueva teoría ha de predecir cosas con las que comprobar si es válida o no. De ser cierta la teoría del Big Bang debíamos ser capaces de encontrar lo que se conoce como radiación cosmológica de fondo o fondo de microondas.

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Cuando miramos al cielo y vemos una estrella no estamos viendo el presente de esa estrella sino cómo era esa estrella miles de años atrás. Conforme más lejanas son, más antiguas. Así, si queremos entender el universo antiguo, sólo tenemos que buscar estrellas lo suficientemente alejadas.

¿Hay un límite? Sí, lo hay. En los primeros años, unos 380 mil años, la temperatura del universo era tan alta que no había luz. Hizo falta que se formaran los primeros átomos de hidrógeno, el átomo más sencillo y pequeño, para que los fotones, o sea, la luz, corrieran libremente.

Justo en ese momento, se alzanzó una temperatura de unos 3000 K (algo más de 2700ºC). Ese calor se ha ido disipando a lo largo de los 14 mil millones de años del universo. Pero, si la teoría del Big Bang era cierta, debía quedar un pequeño rastro. El fondo de microondas es ese rastro que detectamos hace ya muchos años.

Pero no todo lo que reluce es oro. El Big Bang se encuentra con unas cuantas dificultades, y alguna de ellas, seria;

1º/ Imagina una barra de hierro. Encendemos un fuego y la acercamos. Eso calentará las moléculas que queden cerca del fuego. Y estas calentarán a sus vecinas hasta que toda la barra tenga la misma temperatura. Pero si esta barra fuera enorme, nos costaría mucho que el calor llegara a los lugares más alejados. Es decir, sería difícil conseguir un equilibrio térmico. Ahora imagina el universo; tenemos partículas muy alejadas entre si, por lo que imaginar que todas las partículas tengan la misma temperatura parece improbable. Lo que los físicos esperaban encontrar en el fondo de microondas era que el calor residual que quedara de aquella explosión variara mucho en función de la dirección en la que la tomáramos la temperatura. En cambio, todos los puntos parecen tener temperaturas parecidas. Eso juega en contra del Big Bang.

2º/ Esto que viene ahora es muy difícil de visualizar. En nuestra vida cotidiana, observamos objetos con diversas formas geométricas (planos, esferas…). El universo, que recuerdo que tiene 4 dimensiones (3 de espacio y 1 de tiempo), también podría tomar diversas formas. En concreto, las más importantes; plana (la más intuitiva), esférica (si partes de un punto y sigues una línea recta, acabas volviendo a ese punto otra vez) o hiperbólica (que es parecida a la montura de un caballo). Las mediciones dicen que vivimos en un universo casi plano. El problema es que, por lo visto, un universo casi plano debería derivar muy rápido en uno esférico. Y eso no es lo que está sucediendo. Sigue siendo casi plano.

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Le hemos buscado una explicación a esto, y la única razonable sería que, en una edad muy temprana, el universo se expandiera a una velocidad superior a la de la luz. Es lo que se conoce como modelo inflacionario [AÑADIDO: A 18/03/2014 parece que este modelo ha sido comprobado]. Pero eso acarrea otras consecuencias de las que hablaré otro día.

Que nadie se asuste. La teoría del Big Bang tiene muchos puntos a favor y está muy aceptada por la comunidad científica. Pero eso no quiere decir que no tenga puntos débiles ni que tenga que ser lo que, en realidad, sucedió. Y eso es bueno porque sus posibles errores son puertas a un mayor conocimiento en el futuro.

comedia / musical / peliculas / romántica

Levando anclas

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Valoración: 9/10

Tag line. Dos marineros reciben un permiso de cuatro días. Uno de ellos es un ingenuo (Frank Sinatra) que se enamora de una joven (Kathryn Grayson). El otro (Gene Kelly), está curtido en mil batallas con las mujeres y le ayudará a conquistarla.

Breve crítica. Me ha encantado la puesta en escena y, sobre todo, el guión. Me parece muy ocurrente, con situaciones bien buscadas, bien resueltas, con un excelente sentido del humor y unas gotitas de fantasía que le encajan a la perfección. Un placer para la vista ver bailar a Kelly y para los oídos escuchar la voz de Sinatra.

Género. Comedia musical.

Director. George Sidney.

Guión. Isobel Lennart.

Intérpretes. Gene Kelly, Kathryn Grayson, Frank Sinatra, José Iturbi.

Título original. anchors aweigh.

Año de estreno. 1945.

País. USA.

personal

Las supernovas, los fuegos artificiales del espacio

Mirar al cielo de noche siempre resulta gratificante, a no ser que vivamos cerca de grandes núcleos urbanos que, por cierto, es lo que nos pasa a la mayoría. Sin saber por qué, el cielo estrellado nos parece de una gran belleza.

Pero eso es porque no hemos tenido la oportunidad de ver una supernova, a una distancia prudencial, claro. Una supernova es la explosión de una estrella hipermasiva en el momento de morir. En la imagen podéis admirar la belleza de la supernova de Kepler, que estalló muy cerquita nuestro; apenas 20000 años luz. Se pudo ver a simple vista con un tamaño parecido al de un planeta y más que cualquier estrella que no fuera, obviamente el sol. Una explosión de este tipo demasiado cerca, sería fatal para la Tierra.

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Pero, ¿cómo se produce algo así? ¿Por qué explota una estrella cuando muere? Primero hay que entender cómo funciona una estrella. La pregunta clave es, si la gravedad es tan fuerte, ¿por qué no se va haciendo cada vez más pequeña y más pequeña? Es verdad que la gravedad tiende a juntar cada vez más la materia. Entonces, ¿qué se lo impide?

Hay dos procesos que luchan contra la gravedad. El primero es muy intuitivo. ¿Qué pasa si comprimes algo? Que se calienta. El calor no es más que partículas moviéndose muy rápido. Las partículas chocan unas con otras, y eso las aparta. Por eso las cosas se dilatan. Y eso es justo lo que les pasa a las estrellas. Esta fuerza contrarrestadora es la que predomina en las pequeñas estrellas, como nuestro sol.

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Hay otra fuerza. La enorme presión a la que la gravedad somete a las partículas del núcleo de la estrella, acaba haciendo que se fusionen. Y lo que provocan son reacciones termonucleares que dejan en una broma de mal gusto las más destructivas bombas nucleares que tenemos. También resulta intuitivo entender que esas explosiones tienden a expandir a la estrella. Esta fuerza es la que predomina en las grandes estrellas para luchar contra la gravedad.

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Así, gracias al equilibrio entre la gravedad y la dilatación y las explosiones nucleares, las estrellas mantienen su tamaño. Pero estas van consumiendo su combustible. Esto es, el morenito que nos sale en verano es porque nuestra estrella, el sol, se ha desprendido de mucha energía en forma de fotones, o sea, luz (en la siguiente imagen, la a). ¿Qué le pasará cuando se le acabe el combustible? Si la estrella es pequeña, como es el caso, simplemente se enfriará hasta convertirse en un pedrusco enorme.

Si la estrella es gigante, hay un momento en el que el combustible (partículas de hidrógeno que hay por el núcleo) se agota (b). En ese momento, la fuerza que hacían las reacciones nucleares para contrarrestar la gravedad, desaparecen. Y la estrella se comprime, implosiona o, como dicen los cosmólogos, colapsa (c). De repente, toda la materia de la estrella cae, de golpe, a su propio núcleo.

Ahora imaginaos toda esa cantidad enorme de materia concentrándose en tan poco espacio a una velocidad tan grande que cuesta de imaginar. ¿Qué sucede luego? Lo único que podía pasar. La materia choca con tanta violencia que sale disparada en dirección contraria extremadamente caliente y liberando una energía enorme (d,e, y f). Y ahí tenéis la supernova.

supernova

(imagen de la wikipedia)

Hay varios tipos de supernovas, pero no voy a entrar en eso. Si queréis información más técnica sobre eso, os paso el enlace de la wikipedia.

Y después de la supernova, ¿qué? Mucha de la materia/energía (ya vimos que era lo mismo) sale disparada. Pero puede quedar una parte que no escapa de la gravedad de la estrella. Este nucleo recibe el nombre de estrella compacta u objeto compacto. Hay varios tipos y, en resumen, son estrellas que no luchan con la gravedad gracias a reacciones termonucleares sino a fuerzas de origen cuántico.

Si la masa que ha quedado sigue siendo muy grande, estas fuerzas cuánticas tampoco son capaces de luchar en equilibrio de fuerzas con la gravedad y colapsan de nuevo. Y esta vez lo que generan es un agujero negro.

Las supernovas son fuente de contradicciones muy fuertes; destruyen lo que encuentran a su paso y son, en algunos casos, el nacimiento de un agujero negro. Pero, a cambio, son de una belleza difícil de superar y reparten materia por el universo que facilita la formación de, por ejemplo, planetas y otras estrellas. Fuente de vida y de muerte a la vez. No está mal para el guión de una película… 😉

televisión

Cuando matar te hace líder

Brazil TV Killings

Hoy he leído en La Vanguardia que un popular presentador de televisión de Brasil, Wallace Souza, está acusado de asesinato. Por lo visto, el pájaro tenía un programa sobre crímenes e iban en directo a cubrirlos. La policía empezó a sospechar cuando, por 5 vez, el presentador y su chaleco antibalas llegaban antes que ellos mismos. Y es que se jactaba de ser siempre el primero en llegar a las noticias.

Por si eso era poco, resulta que dicho presentador fue expulsado de la policía en su día (La Vanguardia no especifica los motivos) y ahora es, nada menos, que diputado por el estado de Amazonas. Por cierto, el legislador más votado de las últimas elecciones.  Y, según el box populi, aspiraba a presentarse como gobernador del estado.

Si se le declara culpable, el presunto plan era genial. Wallace se convierte en un popular presentador de una televisión dirigida con su hermano, Canal Livre. Los contenidos demuestran la lamentable seguridad ciudadana del estado de Amazonas y, además, te conviertes en valedor de el valor de la seguridad. Te presentas a las elecciones y… probablemente ganas.

Todo el mundo acepta que los noticiarios son utilizados por las maquinarias de los partidos políticos para convencer de sus verdades a todo el mundo. Pero a veces he defendido que no es el único programa en el que eso se produce, la mayor parte de ellas con esaso éxito.

Lo que llama la atención en este caso es que el tipo puede que estuviera cometiendo los crímenes para crecer en audiencia y popularidad. Pero que nadie se engañe. Para conseguir objetivos políticos no personalizados en él, no hacía falta tanto.

Matar de forma sistemática para demostrar que algo no va bien es más viejo que el ir a pie. Uno de los más sonados, cuando en Italia la logia masona Propaganda 2, más conocida como P-2, de extrema derecha, se hinchó de cometer asesinatos para luego reivincarlos en nombre de entidades comunistas.

Pero lo nuevo (o no) de este caso es el aprovechar los reality shows para eso. Entonces, ¿sirven a ciertas causas estos programas? Para mí, sí por dos motivos;

– Algunos partidos hacen girar su discurso sobre la inseguridad ciudadana y sobre la no conveniencia de que ciertas comunidades extrangeras convivan con nosotros por una especie de maldad congénita que tienen por ser de donde son. Y hace innecesario que el político salga cada día a recordarnos que la cosa está mal porque para eso ya está la tele. Además, hay toda una industria, la de la seguridad, que se beneficia de forma evidente.

– Tienen un punto de incontestable; lo que pasa, pasa. Y la televisión es la gran valedora de la verdad. Si sale en la tele, debe ser cierto. Mi abuela siempre dice que “si no, no saldría”. Lo que sus espectadores no tienen en cuenta es que, con el volumen de gente que hay en nuestro país, es fácil encontrar casos así cada día, por inhabituales que sean.

Con algunas imprecisiones, Michael Moore en su famoso documental Bowling for Columbine exponía cómo estos programas que hablan de la creciente inseguridad ciudadana eran utilizados por el sistema político para poder ejercer un mayor control sobre el ciudadano e, incluso, atacar otros países. La tesis era; si el ciudadano tiene miedo, yo podré extender mis redes y controlar mejor lo que hace.

Wallace Souza nos ha dado una buena lección que es mejor no olvidar. La televisión no es la valedora de ninguna verdad más allá de que, lo que expone, sale en la caja tonta.